Con 2 años mi madre me vistió de chulapa. El resultado fue este. Siempre que vemos esta foto, me resalta la felicidad que irradiaba correteando por todo el barrio. Sin duda, no lo recuerdo, pero esa energía y manera de moverme por la vida, con la gente que me rodea, me hace sentirme muy representada y conectada a mi.

Lejos de empezar con 2 años en el teatro, mi camino por estos lugares comienza en la universidad (aunque el ser un poco personaje, ya me viene de serie) Esto lo hacía como una actividad extra, por probar algo nuevo y, aunque pensaba que venía de visita, me quedé.
Tras más de 5 años en el Aula de teatro de la UAM, junto con la participación en encuentros de creación teatral en Bolonia, ( los Cantamaggios) así como mi experiencia de continuar en diversos talleres de teatro viviendo en Avignon, terminé por volver a España y hacer la formación en la escuela de teatro físico Mar Navarro, basada en la pedagogía Lecoq.
Todo este recorrido me ha llevado, por un lado, a entender el teatro como una herramienta de transformación social y pedagógica, que trato de tener presente en el aula como profesora de instituto y a cofundar recientemente ( y terminado de rematar) la CIA “Mambrú, teatro y movimiento” con la que llevamos dos espectáculos de teatro social y de calle: “Cosmonautas de proximidad” y “Planeta Guerra.”

Al mismo tiempo, hemos sido seleccionadas por la UIMP para impartir talleres de creación teatral, en el curso 2024 con “El frágil teatro del mundo” y para este curso 2025 estaremos con “ Teatreando, arriba y abajo de la ciudad.”

Mientras tanto aquí sigo, poniéndole energía, alegría, amor y tiempo (aunque muchas veces haya que sacarlo de debajo de las piedras) y con muchas ganas de seguir creando y participando en nuevos proyectos, tanto de teatro como de audiovisual para no dejar nunca de crecer en el arte de contar historias.

Ana Gonjar.